A finales de la semana pasada, un periodista del periódico británico The Guardian publicó en el libro “Wikileaks: La Guerra Julian Assange contra el Secreto” -redactado en apenas tres semanas- la contraseña que permite el acceso a los datos encriptados de dicho archivo. El periodista se llama David Leigh y desde un principio ha mantenido relaciones tensas con Wikileaks por negarse a mantener la información de Wikileaks en equipos desconectados de Internet o por enviar el archivo del Cablegate al The New York Times sin consentimiento de Assange.
Esta actuación ha sido criticada desde los otros cuatro periódicos que mantenían la exclusividad de los cables, mientras que desde The Guardian aseguran que creían que la contraseña tenia caducidad (¿?) y que por eso la publicaron.
Tras haberse descubierto el pastel,parece que en el fichero se expone a los informantes, porque los cables no están editados, Tarea que corresponde a los cinco periódicos en los que Wikileaks confió.
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